El presidente Javier Milei presentará el 1° de marzo un proyecto de reforma del Código Penal en Argentina, que busca endurecer las penas para delitos graves y establecer la prisión perpetua como una condena efectiva de por vida. La iniciativa, liderada por el secretario de Justicia Sebastián Amerio, propone aumentar las penas por homicidios agravados y violaciones, además de implementar cárceles privadas para reducir la sobrepoblación carcelaria. Con esta reforma, el gobierno de Milei aspira a mejorar la seguridad y asegurar que los delincuentes cumplan sus condenas sin posibilidad de reducción. Para más detalles, visita el enlace.
El Gobierno nacional se encuentra en la fase final de un proyecto de reforma del Código Penal, el cual tiene como objetivo principal endurecer las penas para ciertos delitos y garantizar que la prisión perpetua sea realmente efectiva y de por vida. Esta iniciativa será presentada por el presidente Javier Milei el próximo 1° de marzo, durante la apertura del año legislativo.
La propuesta es liderada por el secretario de Justicia, Sebastián Amerio, en colaboración con la Comisión de Reforma del Código Penal, presidida por el jurista Jorge Buompadre. Entre los cambios más destacados se incluyen:
Fuentes oficiales involucradas en la elaboración del proyecto han declarado: «Nosotros queremos que la perpetua sea, efectivamente, perpetua, para toda la vida».
El grupo encargado de esta reforma está compuesto por figuras clave del ámbito jurídico y judicial, incluyendo al ministro de Justicia Mariano Cúneo Libarona, así como jueces destacados como Mariano Borinsky, María Eugenia Capuchetti y Ricardo Ángel Basílico. Además, participan juristas como Carlos Manfroni, Horacio Romero Villanueva, Fernando Soto, Valeria Onetto y Mercedes Rodríguez Goyena.
Recientemente, el juez Mariano Borinsky se reunió con Cúneo Libarona para ultimar los detalles antes de su presentación ante el Congreso.
Javier Milei ha manifestado en numerosas ocasiones su compromiso con una política de tolerancia cero hacia el delito, fundamentada en el principio de «el que las hace, las paga».
Desde su perspectiva, el aumento de penas no solo busca castigar a los delincuentes, sino también disuadir futuros delitos, ya que un potencial criminal podría pensarlo dos veces si sabe que enfrentará condenas severas sin posibilidad de reducción.
Dicha doctrina se apoya parcialmente en las teorías del economista Gary Becker, autor del libro «Crimen y castigo», quien analizó el fenómeno del delito desde un enfoque económico y propuso estrategias más rigurosas para combatirlo.
Aparte del cambio en el Código Penal, la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, está trabajando en un plan para construir cárceles bajo gestión privada con el fin de mitigar la sobrepoblación carcelaria.
Este modelo fue anunciado previamente junto al jefe de Gobierno porteño, Jorge Macri, e incluye la creación de dos prisiones privadas en la Ciudad de Buenos Aires; sin embargo, hasta ahora no han sido inauguradas.
A través de estas iniciativas, el gobierno encabezado por Milei busca transformar tanto el sistema judicial como penitenciario, aumentando así la seguridad y asegurando que quienes cometen delitos cumplan efectivamente sus condenas.