Un nuevo proyecto de ley propone transferir el Puerto de Buenos Aires y otras funciones del Estado Nacional a la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA), con el objetivo de fortalecer su autonomía y convertir el puerto en un polo turístico internacional. La iniciativa busca optimizar la gestión local, mejorar servicios y potenciar la inversión mediante una administración más eficiente. Además, se prevén obras de infraestructura para diversificar la matriz portuaria metropolitana. Este traspaso es parte de un proceso de descentralización que comenzó en 2006 y busca consolidar a CABA como una entidad autónoma capaz de enfrentar los desafíos urbanos actuales. Para más detalles, visita el enlace.
En un avance significativo hacia la descentralización, se ha presentado un proyecto de ley que propone la transferencia de funciones y bienes esenciales del Estado Nacional a la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA). Esta iniciativa busca consolidar la autonomía de la ciudad, reconocida en la reforma constitucional de 1994, mediante el traspaso del Puerto de Buenos Aires, la Terminal de Ómnibus de Retiro, la Inspección General de Justicia (IGJ) en materias no federales y el Registro de la Propiedad Inmueble.
El proyecto contempla que el Puerto de Buenos Aires sea objeto de obras de infraestructura y urbanización, con el propósito de posicionarlo como un polo clave para atraer al turismo internacional.
Para lograr este objetivo, se considera esencial una mayor diversificación de la matriz portuaria metropolitana. Puertos como Zárate, Dock Sud y La Plata son identificados como puntos estratégicos para afrontar este desafío.
El proyecto establece las siguientes disposiciones:
De acuerdo con el planteamiento legislativo, las transferencias propuestas fortalecerán la capacidad administrativa de la Ciudad, optimizando el uso de recursos públicos y mejorando los servicios ofrecidos a los ciudadanos.
Bajo un sistema federal, la gestión local permite respuestas más eficientes, adaptadas a las necesidades específicas de los habitantes. Entre los argumentos destacados del proyecto se encuentran:
La descentralización en CABA comenzó con el traspaso del sistema educativo en 2006 y continuó con el área de seguridad en 2016. Sin embargo, aún quedan sectores importantes por abordar, como justicia y transporte público. Este nuevo proyecto pretende avanzar en esa dirección, reforzando tanto la autonomía local como el federalismo argentino.
Si se aprueba esta ley, se marcará un hito en el fortalecimiento autónomo de Buenos Aires, permitiendo un mayor control sobre áreas estratégicas. Esto no solo optimizará la gestión pública, sino que también aumentará su capacidad para enfrentar los retos propios de una metrópoli significativa en el país.