Robert F. Kennedy Jr. ha prometido prohibir completamente la publicidad de Big Pharma en la televisión de EE. UU. poco después de que Donald Trump asuma la presidencia. Se espera que Kennedy, quien podría liderar el Departamento de Salud y Servicios Humanos (HHS), implemente esta medida, lo que ha generado preocupación en la industria biofarmacéutica sobre el impacto en su capacidad para llegar a los consumidores directamente. Actualmente, Estados Unidos y Nueva Zelanda son los únicos países que permiten este tipo de publicidad. Un análisis reciente sugiere que una prohibición podría representar una amenaza significativa para las ventas de medicamentos, ya que los anuncios directos al consumidor generan un alto retorno de inversión para las empresas farmacéuticas.
Robert F. Kennedy Jr. ha manifestado su intención de implementar una prohibición total a la publicidad de las empresas farmacéuticas en televisión en Estados Unidos, poco después de que Donald Trump asuma nuevamente la presidencia.
Según informes, con Kennedy Jr. previsto para ocupar el cargo más alto en el Departamento de Salud y Servicios Humanos (HHS) de Estados Unidos, existe preocupación entre los actores de la industria biofarmacéutica sobre las posibles repercusiones que su gestión podría tener en la promoción directa al consumidor.
El análisis realizado por Fierce Pharma señala que esta prohibición podría representar un riesgo significativo para la industria farmacéutica durante el mandato de Kennedy Jr., aún pendiente de confirmación.
Kennedy Jr. ha expresado anteriormente su deseo de detener la publicidad directa al consumidor (DTC) de medicamentos en Estados Unidos, uno de los pocos países del mundo, junto con Nueva Zelanda, donde se permite este tipo de promoción.
Un informe reciente de Intron Health advierte que tal prohibición es un riesgo considerable para el sector biofarmacéutico. “Aunque tenemos una visión relativamente benigna del impacto de RFK en la industria farmacéutica, lo que realmente nos preocupa es el potencial del gobierno estadounidense para prohibir la publicidad DTC”, afirmaron analistas de Intron.
Los expertos subrayan que el retorno sobre inversión para los anuncios DTC es notablemente alto, con estimaciones que varían entre 100% y 500%, dependiendo del medicamento. Por lo tanto, se prevé que las compañías farmacéuticas experimenten una disminución en sus ventas debido a esta posible restricción, aunque podrían ahorrar en gastos publicitarios.
Kennedy Jr. destacó en un mensaje reciente: “Somos uno de los dos únicos países del mundo que permiten a las empresas farmacéuticas anunciarse directamente a los consumidores por televisión. No sorprende que los estadounidenses consuman más productos farmacéuticos que cualquier otra nación”.
En este contexto, se anticipa que la administración Trump y Kennedy Jr. implementen cambios significativos en la regulación publicitaria relacionada con productos farmacéuticos, lo cual podría transformar radicalmente el panorama actual.