CLAVES

Aumento récord en el precio de la electricidad en Alemania por falta de viento

Precios electricidad

OpenAI | Lunes 16 de diciembre de 2024

La falta de viento en Alemania ha provocado un aumento significativo en el precio de la electricidad, alcanzando niveles récord. Este fenómeno, conocido como "dunkelflaute", se caracteriza por bajas temperaturas y escasa generación eólica, lo que obliga a recurrir a centrales de ciclo combinado que funcionan con gas. Este jueves, el precio promedio alcanzó los 414 dólares por megavatio hora (MWh), el más alto desde diciembre de 2022, y en ciertos momentos superó los 981 dólares por MWh. Las reservas de gas también han disminuido, lo que genera preocupación sobre el suministro energético durante el invierno. A pesar de la situación actual, las autoridades creen que habrá suficiente gas para enfrentar la temporada fría.



En el ámbito del sector eléctrico en Alemania, se utiliza el término «dunkelflaute» para describir una serie de condiciones que son comunes durante los anticiclones fríos. Este fenómeno se caracteriza por bajas temperaturas, que aumentan la demanda de energía, junto con una casi total ausencia de viento, lo que limita significativamente la capacidad de generación eléctrica a través de parques eólicos.

Ante este panorama desfavorable, se hace necesario recurrir a las costosas centrales de ciclo combinado que funcionan con gas, lo cual provoca un incremento considerable en los precios de la electricidad. Actualmente, esta situación adversa está impactando a Europa central, llevando el coste de la electricidad en Alemania, la mayor economía del continente, a niveles sin precedentes, comparables únicamente a aquellos observados durante una crisis energética.

Aumento desmedido de precios

Este jueves, los consumidores alemanes enfrentarán un costo promedio de 414 dólares por megavatio hora (MWh), cifra que representa el máximo nivel desde diciembre de 2022, cuando se vivieron tensiones por la invasión rusa a Ucrania y las preocupaciones sobre el suministro de gas natural en Europa.

En ciertos intervalos horarios, los precios alcanzaron cifras aún más alarmantes: entre las 17:00 y las 18:00 horas, el mercado mayorista alemán superó los 981 dólares por MWh, estableciendo un récord que no se había visto en los últimos 18 años. La principal causa detrás de esta escalada es la escasez de viento. En esta época del año, el sector eólico alemán suele generar cerca de 20 gigavatios (GW) de energía eléctrica; sin embargo, el miércoles pasado apenas logró superar los 3 GW.

Efectos sobre la generación solar y reservas energéticas

A esta situación se suma un cielo nublado, que ha reducido drásticamente la producción de energía solar fotovoltaica. Esto ha llevado a que las centrales de ciclo combinado operen a su máxima capacidad, incrementando así los costos asociados a la producción energética.

A diferencia de los momentos más críticos durante la crisis energética del año anterior, donde el precio récord del gas fue el principal desencadenante y generó gran incertidumbre, las condiciones actuales parecen ser temporales. Sin embargo, no es la primera vez que se presenta una situación similar; en noviembre pasado, una mala racha en la producción eólica llevó a que el precio superara los 839 dólares por MWh en ciertos momentos, aunque posteriormente los costos se normalizaron.

Crisis en las reservas de gas

El uso intensivo de las centrales de ciclo combinado no solo afecta los precios eléctricos, sino también las reservas de gas almacenadas en depósitos subterráneos. Esta métrica ha sido objeto de seguimiento constante desde el inicio de la crisis energética.

A principios de noviembre, Alemania contaba con reservas al 98% de su capacidad, pero esta cifra ha caído rápidamente al 87%, continuando su descenso acelerado en días recientes. A nivel europeo, las reservas medias están actualmente al 80%, habiendo experimentado una disminución notable de 15 puntos porcentuales en cinco semanas.

A pesar del panorama desalentador, las autoridades consideran que habrá suficiente gas para afrontar el invierno venidero, incluso si enero y febrero resultan más fríos de lo anticipado. Sin embargo, el rápido vaciado de depósitos podría complicar su reabastecimiento para la próxima temporada invernal.

Según estimaciones realizadas por la consultora energética ICIS, es probable que los depósitos europeos cierren 2024 con niveles ligeramente superiores al 70%, cayendo hasta un 33% hacia finales de marzo. Este escenario refuerza las inquietudes sobre los desafíos estructurales del mercado energético europeo, particularmente en Alemania, país que recientemente decidió cerrar todas sus centrales nucleares debido a presiones políticas.

No obstante lo anterior: si Alemania hubiera mantenido sus centrales nucleares operativas, habría contado con suficiente capacidad para generar energía y ofrecer precios mucho más bajos a sus ciudadanos.

La noticia en cifras