El magistrado Ángel Hurtado, encargado de la causa contra el fiscal general del Estado y la fiscal jefa provincial de Madrid por un posible delito de revelación de secretos, ha decidido deducir testimonio debido a las filtraciones de un informe pericial de la UCO. Esta acción se enmarca dentro de las quejas presentadas por los fiscales afectados y también por el abogado de la acusación particular. Hurtado ha rechazado las denuncias sobre irregularidades en el informe, defendiendo la labor de la Unidad Central Operativa de la Guardia Civil. La decisión se comunica al decanato de los juzgados de Madrid para los trámites correspondientes.
El magistrado de la Sala de lo Penal, Ángel Hurtado, ha tomado una decisión clave en la causa abierta contra el fiscal general del Estado y la fiscal jefa provincial de Madrid. Esta investigación se centra en un presunto delito de revelación de secretos. En su reciente providencia, Hurtado ha acordado deducir testimonio y remitir al decanato de los juzgados de Madrid las quejas presentadas por Álvaro García Ortiz y Pilar Rodríguez. Estas quejas están relacionadas con las filtraciones del informe pericial elaborado por la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil, fechado el 21 de noviembre.
Además, el magistrado también ha decidido enviar su auto del 25 de noviembre, que contiene advertencias sobre el secreto de las actuaciones. Esta acción subraya la seriedad con la que se está tratando el asunto y la necesidad de mantener la confidencialidad en los procedimientos judiciales.
La decisión del instructor también aborda una queja presentada por el abogado de la acusación particular, quien representa a Alberto G.A., en relación con las mismas filtraciones. En su providencia, Hurtado responde a la solicitud de García Ortiz para que se emitan instrucciones a la UCO con el fin de evitar la inclusión de mensajes privados ajenos a los hechos en su informe. Sin embargo, el magistrado considera que no procede acceder a esta petición, argumentando que “no cabe formular reproche alguno al trabajo realizado por una unidad tan especializada y reconocida como es la UCO”, aunque reconoce el derecho de las partes a cuestionar dicho trabajo.
Por otro lado, Hurtado ha desestimado una denuncia presentada por la Abogacía del Estado, que representa a los dos investigados. Esta denuncia alegaba irregularidades y omisiones en el informe pericial de la UCO del 21 de noviembre, así como vulneraciones de derechos fundamentales. El magistrado reafirma su postura al considerar que “no cabe poner reproche a dicha prueba pericial”, reiterando así su confianza en la labor realizada por esta unidad especializada.
El instructor de la causa es el magistrado de la Sala de lo Penal Ángel Hurtado.
La causa se ha abierto por un presunto delito de revelación de secretos.
El instructor ha dictado una providencia en la que acuerda deducir testimonio y enviar las quejas por las filtraciones al decanato de los juzgados de Madrid.
El informe pericial es de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil, fechado el 21 de noviembre, y ha sido objeto de quejas por filtraciones.
El instructor rechazó la solicitud argumentando que no cabe formular reproche alguno al trabajo realizado por la UCO, aunque reconoce el derecho de cuestionar dicho trabajo.
El instructor rechazó la denuncia por irregularidades y omisiones en el informe pericial, considerando que no cabe poner reproche a dicha prueba pericial realizada por una unidad especializada como es la UCO.