La administración saliente de Joe Biden propone subsidiar inyecciones de péptidos de veneno de reptiles, como Ozempic y Wegovy, para la pérdida de peso en Medicare y Medicaid. Esta medida busca clasificar estos medicamentos como tratamientos para la obesidad, lo que permitiría su cobertura en programas gubernamentales. Se estima que el costo total para el gobierno sería de aproximadamente 36 mil millones de dólares en diez años. Sin embargo, críticos como Robert F. Kennedy Jr. abogan por alternativas más saludables, sugiriendo que se invierta en alimentos orgánicos y membresías de gimnasio en lugar de estos fármacos. Además, estudios recientes han planteado preocupaciones sobre efectos secundarios graves, incluyendo la posible reducción del tamaño del corazón.
La administración del presidente saliente Joe Biden ha presentado una propuesta que busca ampliar la cobertura de inyecciones de péptidos de veneno de reptiles, comercializadas como medicamentos para la pérdida de peso, en los planes de salud respaldados por el gobierno, incluyendo Medicare y Medicaid. Esta iniciativa fue anunciada el 26 de noviembre y tiene como objetivo facilitar el acceso a inyectables semanales como Ozempic y Wegovy, fabricados por Novo Nordisk, así como Mounjaro y Zepbound de Eli Lilly.
Actualmente, las normativas limitan la inclusión de medicamentos para la pérdida de peso en los programas gubernamentales. La propuesta del presidente Biden pretende clasificar estos tratamientos como medicamentos para tratar la obesidad, argumentando que esta condición puede provocar enfermedades como la diabetes y problemas cardíacos, que sí están cubiertos bajo las regulaciones actuales. Además, se busca reclasificar estos fármacos como tratamientos para una "enfermedad crónica" en lugar de simples medicamentos para perder peso.
Chiquita Brooks-LaSure, administradora de los Centros de Servicios de Medicare y Medicaid (CMS), afirmó ante los medios que "la comunidad médica hoy concuerda en que la obesidad es una enfermedad crónica". Según la propuesta, se espera que este cambio reduzca significativamente los costos directos para los pacientes; un suministro mensual de estos medicamentos puede alcanzar hasta $1,000.
Las autoridades gubernamentales han indicado que el costo mayoritario será asumido por el gobierno federal, con estimaciones que apuntan a aproximadamente $25 mil millones para Medicare y $11 mil millones para Medicaid durante un período de diez años. Los estados tendrían que cubrir cerca de $3.8 mil millones.
La propuesta deberá someterse a un período de comentarios públicos de 60 días antes de su implementación. Para entonces, el presidente electo Donald Trump habrá asumido el cargo.
Los analistas destacan que la próxima administración decidirá si avanzar con esta propuesta. Robert F. Kennedy Jr., activista en salud y abogado ambiental nominado por Trump para liderar el Departamento de Salud y Servicios Humanos, ha expresado su oposición a este tipo de medicamentos. En diversas ocasiones ha manifestado que Estados Unidos no debería financiar estos tratamientos a través de Medicaid o Medicare; en cambio, aboga por una expansión del acceso a alimentos saludables y membresías en gimnasios.
Kennedy argumentó: "Por la mitad del precio de Ozempic, podríamos adquirir alimentos orgánicos criados regenerativamente para cada estadounidense, tres comidas al día y una membresía al gimnasio para cada persona obesa".
A medida que se discute esta propuesta, surgen preocupaciones sobre los posibles riesgos asociados con el uso prolongado de Ozempic y Wegovy. Un estudio reciente publicado en The Lancet reveló que los efectos secundarios a largo plazo pueden incluir un efecto reductivo sobre el corazón.
A pesar de los beneficios inmediatos observados con estos fármacos —que van desde mejoras en la salud metabólica hasta alivio del dolor— algunos expertos advierten sobre la posibilidad significativa de pérdida muscular esquelética junto con la reducción del tejido adiposo. Investigadores canadienses administraron semaglutida (el ingrediente activo en Ozempic) a ratones durante 21 días, observando una pérdida considerable tanto en peso corporal como en masa grasa entre aquellos con obesidad.
Aunque no se registraron cambios en la función cardíaca ni en el grosor de las paredes cardíacas durante el estudio, ambos grupos tratados mostraron disminuciones en la masa total del corazón así como en el tamaño individual de las células musculares cardíacas.
Dada esta información preliminar, los autores del estudio sugieren evaluar cuidadosamente la estructura y función cardíaca en estudios clínicos previos y actuales relacionados con estos medicamentos. Este llamado es respaldado por otro artículo reciente publicado por una revista asociada con la Asociación Americana del Corazón, donde se enfatiza la necesidad de investigar más objetivamente los efectos de los agonistas GLP-1 sobre la salud muscular.
Para más información relacionada con este tema, visite PharmaceuticalFraud.com.
Descripción | Cifra |
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Costo estimado para Medicare en 10 años | $25 mil millones |
Costo estimado para Medicaid en 10 años | $11 mil millones |
Costo aproximado mensual de los medicamentos | $1,000 |
Costo total que deberán pagar los estados | $3.8 mil millones |