El Partido Popular (PP) ha denunciado que la corrupción ha invadido el Gobierno de Pedro Sánchez, su partido y su entorno familiar. Durante un debate en el Senado, los senadores Inmaculada Hernández y Javier Campoy afirmaron que Sánchez, quien antes se presentaba como un defensor de la decencia, ahora es considerado "el maestro de la corrupción". Criticaron la falta de autocrítica del PSOE y señalaron múltiples casos de corrupción que involucran a altos cargos del Gobierno y familiares de Sánchez. Los senadores instaron al Ejecutivo a colaborar con la Justicia para esclarecer estos casos y a asumir responsabilidades políticas. La noticia resalta una creciente preocupación por la corrupción en el ámbito político español.
La senadora del Grupo Parlamentario Popular, Inmaculada Hernández, ha denunciado que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, se ha convertido en un símbolo de la corrupción en España. Durante un debate en el Pleno del Senado, Hernández afirmó que “la corrupción inunda a su Gobierno, a su partido y a su entorno familiar más cercano”.
Esta declaración se produjo en el marco de una moción aprobada por el Senado que insta al Ejecutivo a colaborar con la Justicia para esclarecer los casos de corrupción que lo involucran directamente. Además, se exige al Gobierno que cese sus maniobras de desinformación y asuma sus responsabilidades políticas.
Hernández no escatimó en críticas hacia Sánchez, señalando que “el que nos daba lecciones de decencia hace 10 años ahora es el maestro de la corrupción”, refiriéndose a su implicación en diversos escándalos. La senadora recordó que durante el mandato de Mariano Rajoy “ni un solo ministro tenía abierta una causa judicial”, contrastando esta situación con la actual.
En su intervención, Hernández destacó cómo la corrupción afecta directamente al presidente, mencionando que su esposa y hermano están imputados, así como otros altos funcionarios de su administración. “Ustedes vinieron a combatir la corrupción y lo que hacen es ejercitarla”, subrayó ante los senadores socialistas.
La portavoz adjunta del GPP criticó también la falta de autocrítica dentro del PSOE, acusándolos de “jalear a su jefe y aplaudir a los corruptos”, en referencia a las condenas firmes contra Chaves y Griñán por parte del Tribunal Supremo. “Ustedes blanquean y aplauden la corrupción”, enfatizó.
Hernández hizo hincapié en que desde que Víctor de Aldama destapó varios casos, se han conocido numerosos escándalos relacionados con altos cargos del PSOE. También reprochó al partido socialista por cuestionar la credibilidad de Aldama mientras mantienen vínculos con personas comprometidas en actos ilícitos.
El senador Javier Campoy, también del PP, añadió más detalles sobre las implicaciones legales que enfrenta Sánchez y su círculo cercano. Enumeró una serie de declaraciones judiciales programadas para los próximos días relacionadas con figuras clave de su administración.
Campoy señaló específicamente los nombres involucrados en presuntos delitos económicos y mencionó cómo se ha utilizado la Moncloa como centro para operaciones políticas cuestionables. “Sánchez pasará a la historia por ser el presidente con más casos de corrupción afectando a su gobierno, partido y familia”, concluyó.
Las acusaciones lanzadas por los senadores populares reflejan un clima tenso dentro del panorama político español, donde las acusaciones mutuas sobre corrupción continúan marcando el debate público.
El PP, a través de sus senadores Inmaculada Hernández y Javier Campoy, sostiene que la corrupción ha inundado al gobierno de Pedro Sánchez, a su partido y a su entorno familiar. Acusan a Sánchez de ser "el maestro de la corrupción" y critican la falta de responsabilidad política ante los casos que le afectan.
Los senadores mencionan varios casos de corrupción que involucran a miembros del gobierno y del entorno cercano a Sánchez, incluyendo imputaciones contra su esposa, su hermano y otros exministros. También se refieren a un ritmo alarmante de corrupción asociado con el PSOE desde que comenzaron las investigaciones.
El PP insta al gobierno a colaborar con la Justicia para esclarecer los casos de corrupción, cesar en las maniobras de desinformación y asumir responsabilidades políticas por los delitos investigados.
Inmaculada Hernández critica al PSOE por no hacer autocrítica y por "jalear" a sus líderes corruptos, mientras que Javier Campoy denuncia el uso partidista de las instituciones para atacar adversarios políticos.
Se mencionan varios nombres implicados en casos de corrupción, como el exministro Ábalos y otros altos cargos del PSOE. Se enumeran fechas clave en las que estos individuos deben declarar ante la justicia.