Guillermo Rocafort, escritor español y experto en temas históricos, ha criticado abiertamente a Ana Pastor, fundadora de Neutral. En sus declaraciones recientes, ha señalado que Neutral recibe financiación pública del gobierno de Sánchez, lo que considera un intento de distorsionar la realidad y censurar opiniones contrarias. 'El gobierno financia a Neutral para crear un relato determinado', ha afirmado.
Rocafort ha revelado que el gobierno ha otorgado a Neutral una ayuda pública de 500 mil euros en 2023, proveniente de los fondos europeos Next Generation. '¿Por qué se le ha dado este dinero para producir dos series?', se ha preguntado. Las producciones mencionadas son Botswana, destinada a criticar al rey emérito Juan Carlos I, y Gabinete de Crisis, que aborda catástrofes naturales en España.
'No sé qué vínculo tiene esta serie con los objetivos de los fondos europeos para la recuperación económica', ha añadido Rocafort, cuestionando la legitimidad de tales proyectos. Su crítica se centra en la falta de independencia de Ana Pastor, sugiriendo que su papel como verificadora está comprometido por esta financiación.
El escritor también ha expresado su preocupación sobre el impacto de estas acciones en la libertad de expresión. 'Encima de que nos censuran, utilizan nuestro dinero para devolver favores', ha declarado. Rocafort ve esto como un indicio de un 'auténtico Ministerio de la Verdad' donde las voces disidentes son silenciadas.
'Tal pareciera que es un pago mafioso por los servicios prestados', ha enfatizado, sugiriendo que el uso de fondos públicos para financiar programas sesgados es una práctica peligrosa. Además, ha denunciado cómo quienes critican este sistema son calificados injustamente como 'fascistas'. '¿Cómo lo ven ustedes?', ha preguntado al público, instando a una reflexión sobre la situación actual.
Rocafort concluyó su intervención subrayando la gravedad del asunto: 'Poca gente ve peligroso este tipo de control informativo'. La crítica hacia Ana Pastor y su empresa se basa en la percepción de que están manipulando la información con el apoyo del gobierno. Este contexto invita a un análisis más profundo sobre las implicaciones éticas y sociales del uso de recursos públicos en medios de comunicación.