Este jueves, en la Justicia, la madre de Fabiola Yáñez, quien fue primera dama de Argentina, afirmó que su hija sufrió agresiones por parte del expresidente Alberto Fernández, según informó Página/12.
Ante el fiscal Ramiro Gonzáles, en los tribunales de Comodoro Py, en Buenos Aires, Miriam Verónica Yáñez Verdugo ofreció su testimonio en relación con la causa que involucra al exmandatario por supuesta violencia de género.
Fuentes judiciales informaron que Verdugo, quien arribó al país desde Madrid, España, donde reside su hija, afirmó haber sido testigo de actos de violencia durante el embarazo de Yáñez.
"La empujó y la zamarreó", comentó la testigo, quien aseguró que su hija terminó en el suelo. En ese momento, Yáñez se encontraba en su octavo mes de gestación, antes del nacimiento de Francisco, el hijo que la pareja tuvo en 2022.
En su declaración, Verdugo también corroboró las versiones que indican que Fernández instó a su expareja a someterse a un aborto en 2016, tal como afirmó la denunciante en la acusación.
La madre de Yáñez afirma que Fernández le envió dinero en un sobre con el propósito de que "sacara al nene al día siguiente".
Verdugo, al ser preguntada sobre otros episodios de violencia, recordó una ocasión en la que oyó gritos provenientes de la Quinta de Olivos, donde se ubica la residencia presidencial. Al entrar al dormitorio donde se encontraba su hija, observó que "ella se estaba agarrando la cara y cuando corrió su mano pude ver que tenía cinco dedos marcados en el rostro", relató.
La defensa del dirigente peronista busca desestimar las acusaciones presentando diversas pruebas y testimonios que sugieren un supuesto problema de adicción al alcohol por parte de Fabiola. Aseguran incluso que las lesiones visibles en las fotos de la mujer son consecuencia de sus caídas frecuentes debido al consumo o a los tratamientos estéticos a los que se sometía.
La abogada Silvina Carreira, en una reciente declaración a la prensa, dio a conocer el contenido de unas conversaciones telefónicas que Fernández mantuvo en enero de 2020 con su entonces suegra, donde expresaba su inquietud acerca del supuesto abuso en el consumo de alcohol.
Imputado por "delitos de lesiones leves y graves, doblemente agravadas" así como por "amenazas coactivas" contra su expareja, se encuentra el exmandatario, quien enfrentó estas acusaciones tanto antes como durante su tiempo en la presidencia de Argentina.