Edwin Arrieta Arteaga nació en Lorica, un municipio del departamento de Córdoba, en el Caribe colombiano, donde ejercía como médico cirujano, miembro de la Sociedad Colombiana de Cirugía Plástica, Estética y Reconstructiva (SCCP).
El hijo del actor Rodolfo Sancho era detenido finalmente el 8 de agosto, declarándose culpable del atroz crimen.
Y es que, tal y como sostuvo ante la Justicia, se habían conocido por internet y habían acordado reencontrarse en Tailandia.
Pese a que las primeras informaciones iban llegando, Sancho insistió en todo momento en que había sido un "rehén" de Arrieta, queriendo convertir a su víctima en verdugo pese al fatal desenlace.
"Me tenía como rehén. Era una jaula de cristal. Me hizo destruir la relación con mi novia, me ha obligado a hacer cosas que nunca hubiera hecho”, comentó en su momento a los medios de comunicación.
En cambio, los medios tailandeses confirmaron lo que ya era un secreto a voces en aquel momento: Las investigaciones habían demostrado que Sancho había comprado, entre otras cosas, un cuchillo, guantes de goma y una botella de detergente... ¿Había premeditado el asesinato?
Fue el propio Sancho el que llevó a la policía a siete lugares de la isla donde se encontraba. Lugares donde, al parecer, se deshizo del cuerpo previamente descuartizado de Arrieta.
Un crimen atroz del que ya hay sentencia. Un crimen que pasará a los anales de la historia como una mancha en los medios de comunicación españoles, que quisieron blanquear por momentos la imagen de un asesino confeso que finalmente cumplirá cadena perpetua en Tailandia.