Instrucciones han sido emitidas por el Servicio Nacional de Salud del Reino Unido (NHS, por sus siglas en inglés) dirigidas a los operadores de rayos X, quienes deben preguntar a los hombres si están embarazados antes de llevar a cabo escaneos. Esta medida ha generado que los pacientes "salieran furiosos" de las citas debido a lo ridículo de la pregunta.
La guía "inclusiva" fue desarrollada a raíz de un incidente reportado por The Telegraph, en el cual una mujer que se identificó como hombre se realizó una tomografía computarizada sin saber que estaba embarazada, lo que puso a su bebé en riesgo de ser expuesto a radiación peligrosa.
El personal del NHS ha subrayado que las nuevas directrices suponen un peligro para la seguridad de los pacientes, ya que desincentivan las citas debido a la angustia que generan tanto en hombres como en mujeres. Estas pautas incluyen preguntas sobre su "sexo al nacer" y "nombre y pronombres preferidos", además de hacer afirmaciones "ridículas" acerca de "personas que nacen con variaciones en las características sexuales", según The Telegraph.
Un radiólogo comentó a The Telegraph que un hombre en una "vía urgente de cáncer" "estaba tan molesto por las preguntas en el formulario que gritó, abandonó el departamento y en realidad no se hizo una exploración". Además, advirtió: "Existe un riesgo innecesario para estos pacientes si se molestan tanto y no se hacen la exploración".