Según informaron personas al tanto del asunto, "Irán dijo a los diplomáticos árabes que no le importaba si la respuesta desencadenaba una guerra". Mientras que Irán y Hamás culpan a Israel del ataque, Tel Aviv no ha admitido su participación en el asesinato de Haniya.
Por su parte, el líder supremo de Irán, el ayatolá Alí Hoseiní Jameneí, ha ordenado lanzar un ataque directo contra el país hebreo en respuesta al asesinato de Haniya, según lo publicó esta semana el diario The New York Times con referencia a sus fuentes.
En este contexto, el presidente de EE.UU., Joe Biden, y el primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, abordaron un nuevo apoyo militar de Washington a Tel Aviv para proteger al país hebreo. Así, medios reportan que las Fuerzas Aéreas de EE.UU. envían un escuadrón de cazas furtivos de quinta generación F-22 Raptor a Oriente Medio ante la amenaza de un ataque iraní y sus aliados en la región contra Israel. Se detalla que el Pentágono también está enviando más cruceros y destructores con capacidad de defensa contra misiles balísticos, y podría reforzar las capacidades tierra-aire.