La deuda mundial ha alcanzado un récord de 307 billones de dólares en el primer semestre de 2023, aumentando en 10 billones de dólares. La relación entre la deuda y el PIB global ha vuelto a subir después de siete trimestres consecutivos de caídas, situándose en torno al 336 %. Se espera que la deuda global aumente aún más debido a los déficits presupuestarios. Estados Unidos, Japón, Reino Unido y Francia son los países con mayores incrementos en la deuda. La deuda pública interna en los mercados emergentes está en niveles alarmantes, mientras que la deuda de los hogares en las economías avanzadas ha alcanzado su nivel más bajo en dos décadas.