El líder de esta red criminal era a su vez miembro de la banda motera ‘Bandidos’ y coordinaba la introducción de la droga en España y su posterior envío a Dinamarca. En los registros llevados a cabo en ambos países se pudieron intervenir 70.000 euros en efectivo, un arma de fuego, pequeñas cantidades de sustancias estupefacientes así como diverso material informático y documentos relacionados con la actividad delictiva.