El líder de la ONU advierte de la expansión del conflicto entre Israel y Hamás que ya se observa en el ámbito regional e insta a resolver la crisis de una vez por todas. Al pasar revista de los temas más apremiantes de la agenda mundial, alerta de la creciente crisis de confianza y el caos que puede imperar si el mundo no opta por reformas profundas a las gobernanza global para gestionar las tensiones geopolíticas, reconstruir la confianza y cimentar un mejor futuro para todos.