La película "Indiana Jones and the Dial of Destiny" fue un fracaso en taquilla, generando pérdidas históricas para la productora. A pesar de una inversión de casi US$ 500 millones, solo recaudó US$ 175,4 millones hasta ahora. El film recibió críticas por su trama progresista y la intervención de la CEO de Lucasfilm para darle más protagonismo a un personaje feminista interpretado por Phoebe Waller-Bridge. Aunque se considera una despedida para el personaje de Indiana Jones, no se descarta la posibilidad de futuras secuelas o spin-offs con nuevos protagonistas.