El semanario de humor Charlie Hebdo presenta en su portada el título "La ceremonia de clausura será aún más bella". La revista, conocida por su estilo ácido e irreverente, acompaña esta frase con una ilustración que muestra unos glúteos masculinos en un bote, de los cuales emerge la caricatura de la cantante Celine Dion desde el orificio anal.
La ceremonia inaugural de los Juegos Olímpicos dejó una huella significativa en el público y en quienes lo vieron por televisión, generando emociones que iban desde el asombro hasta la admiración. Para los aficionados a las olimpiadas, París 2024 se convirtió en un momento memorable, ya que fue la primera vez que la ceremonia formal se llevó a cabo fuera de un estadio.
A bordo de 94 barcazas, las 206 delegaciones navegaron por el río Sena, ondeando las banderas de sus países. El evento comenzó en el Puente de Austerlitz, ubicado al este de París, y concluyó con el espectáculo de luces de la Torre Eiffel, al oeste. Durante la transmisión, se mostró la esencia de la cultura francesa a través de emblemáticos lugares de la capital gala, como el Grand Palais, Notre-Dame, el Museo del Louvre y la Casa de la Moneda, entre otros.
En un evento que se prolongó por casi cuatro horas y mantuvo a los aficionados del deporte en un estado de expectación, Lady Gaga, Gorija y Marina Viotti ofrecieron sus voces en vivo. La enorme expectativa fue parte de lo que se había planeado bajo la dirección del actor, comediante y director teatral francés, Thomas Jolly. Durante el recorrido de la antorcha, destacados deportistas como Rafael Nadal, Serena Williams, Carl Lewis, Nadia Comaneci y Zinedine Zidane también participaron.
Sin duda, una producción tan audaz se convirtió en un punto de atención inevitable para la revista más polémica de Francia. Este semanario satírico, que fue fundado en 1992, toma su nombre de una publicación que estuvo activa entre 1969 y 1981. A lo largo del tiempo, su trabajo ha generado juicios, discusiones sobre la libertad de expresión, acusaciones de incitación a grupos religiosos, así como agresiones y atentados sangrientos.
El ataque más devastador ocurrió el 7 de enero de 2015 en la sede de París, donde dos hombres encapuchados asesinaron a doce personas y dejaron a otras cuatro gravemente heridas. Entre las víctimas fatales se encontraban los caricaturistas Charb, Cabu, Wolinski y Tignous, así como dos policías. Este atentado yihadista, llevado a cabo por la filial yemení de Al Qaeda, generó una gran atención a nivel internacional, siendo motivado por las caricaturas de Mahoma que se publicaron en 2006.
El 11 de enero de ese año, alrededor de dos millones de personas, incluyendo a más de 40 líderes internacionales, se congregaron en París para una marcha en favor de la unidad nacional. En todo el territorio francés, 3,7 millones de individuos se sumaron a las manifestaciones. Un lema que resonó ampliamente en estas protestas y en las redes sociales fue la frase Je suis Charlie («Yo soy Charlie» en francés). La edición posterior de Charlie Hebdo alcanzó una venta de siete millones de copias en seis idiomas diferentes.