«Auténtica vergüenza»: El problema de los bajos salarios en el Ejército español

La senadora de VOX, Paloma Gómez, ha calificado hoy de «intolerable» y de «auténtica vergüenza» la situacíón que vienen sufriendo los miembros del Ejército español debido a la congelación de los salarios, ya ha pedido la aprobación de una Ley de la Carrera Militar que reconozca esta actividad pública como profesión de riesgo, mejorando las condiciones económicas del personal.

Durante la sesión de control al Gobierno, la senadora de VOX se ha dirigido a la ministra María Jesús Montero, a quien ha reclamado «abordar el asunto de forma seria e inaplazable», ya que «se palpa la falta de respeto y la inacción» por parte de su Ministerio y de el de Defensa. Gómez ha advertido de que «la situación es cada vez peor y, salvo un cambio, habrá un difícil futuro para las Fuerzas Armadas», ya que con tanta responsabilidad y precariedad salarial, ha dicho, «la carrera militar es menos atractiva que nunca».

Para la senadora de VOX, la situación es muy grave, ya que «las retribuciones están prácticamente congeladas, el salario base está en unos 1.140€/mes, porque la subida y las mejoras del SMI no tienen nada que ver con ellos, al haber quedado excluidos del Estatuto de los Trabajadores y depender de los PGE. «Las retribuciones de los militares han quedado profundamente desfasadas», ha dicho.

«Sra. Montero, de salario emocional no se vive»

Gómez ha afirmado que «la esencia de nuestra nación, sus intereses, el bienestar, el desarrollo de sus realidades y potencialidades están garantizados en tanto en cuanto se encuentren debidamente amparados bajo un paraguas de seguridad». Por ello, ha añadido, «Sra. Montero, aquí no vale el dicho ‘cañones o mantequilla’, el gasto en el personal de las Fuerzas Armadas debe verse como una inversión», ya que los militares están al servicio de los ciudadanos, y pertenecen a una sociedad democrática, constituyendo la esencia y garantía de su existencia.

Para VOX, los miembros de las Fuerzas Armadas no sólo se merecen por parte de quienes gobiernan el reconocimiento «mediante empalagosas palabras, medallas honoríficas y pagas no consolidables en el sueldo», sino una mejora en sus condiciones económicas en justicia por su labor, «por luchar en primera linea contra la pandemia, los desastres naturales, el narcotráfico o incluso defendiendo los intereses de España fuera de sus fronteras», ha dicho Gómez.