Más de 200 mafiosos condenados en el 'maxi juicio' de Italia

En el mayor juicio mafioso de Italia en treinta años, más de 200 personas han sido declaradas culpables y sentenciadas por delitos como asociación delictiva, extorsión y soborno. Los veredictos marcan el final de un "maxi juicio" de tres años que tuvo lugar en una sala de alta seguridad en la región de Calabria, en el sur del país. Esta sala fue construida específicamente para albergar hasta 350 acusados, alojar a 400 abogados y escuchar los testimonios de los 900 testigos que denunciaron a una extensa red de miembros pertenecientes a la tristemente célebre 'Ndrangheta.

La sentencia contra el poderoso sindicato del crimen organizado, que tiene el control del comercio europeo de cocaína, representa uno de los golpes más importantes hasta ahora, a pesar de que más de 100 personas fueron absueltas por el tribunal de Lamezia Terme. En diciembre de 2019, casi todos los acusados fueron arrestados después de una larga investigación que comenzó en 2016 y abarcó al menos 11 regiones italianas. Las redadas se llevaron a cabo en Vibo Valentia, Calabria, donde el clan Mancuso de la 'Ndrangheta tiene el control en gran parte de la zona, y contaron con la participación de unos 2.500 agentes.

Varios sospechosos que se escondían en búnkeres ubicados detrás de escaleras corredizas, trampillas ocultas y tapas de agujeros de mantenimiento fueron arrestados por una unidad de carabinieri de élite conocida como los Cacciatori, literalmente "los cazadores". Además, en Alemania, Suiza y Bulgaria también fueron arrestados jefe de policía, concejales locales y empresarios acusados de ayudar a la mafia.

Giancarlo Pittelli, ex diputado de Forza Italia, ha sido condenado a 11 años de prisión por un tribunal debido a su colaboración con un clan mafioso. Durante las redadas, Nicola Gratteri, un fiscal antimafia que lideró la investigación, informó a The Guardian que esta operación era la más grande en contra de los sindicatos del crimen desde los maxi juicios de Palermo entre 1986 y 1992, donde 475 personas fueron llevadas ante el tribunal por fiscales sicilianos.