Previsiblemente, en las elecciones al Parlamento Europeo de junio de 2024, Podemos recuperará la papeleta con su propio logo. Hace una década, el partido fundado por Pablo Iglesias ha establecido los requisitos necesarios para integrarse nuevamente en una coalición. Estos requisitos incluyen la elaboración de las listas a través de un sistema de primarias y la prohibición de vetos personales. En consecuencia, no será posible repetir una confluencia como la que se llevó a cabo con Sumar en las elecciones generales del pasado 23-J.
En un giro de estrategia para fortalecer su "autonomía", ha decidido enfrentarse directamente a la plataforma de Yolanda Díaz, con quien comparte grupo parlamentario en el Congreso. Acusa a Díaz de haber llevado a cabo una "operación" en los últimos dos años para reemplazar a su partido por una "izquierda sumisa al régimen". Durante su participación en una conferencia política, la secretaria general Ione Belarra se congratuló el sábado pasado: "Gracias a todas las personas que han entendido claramente que debíamos detenerla de inmediato". En esta conferencia se han sentado las bases para presentarse de forma independiente en las elecciones de Bruselas del próximo año.
Con el respaldo mayoritario de la militancia, este cambio de rumbo ha sido apoyado con un voto a favor del 86,5% de los 30.883 inscritos que han participado en una consulta interna. Esta consulta interna marca el final del "proceso de fortalecimiento organizativo" que se inició en septiembre con el objetivo de recuperar un partido "fuerte" y con "capacidad de marcar la dirección de Estado". El partido busca llevar las transformaciones democráticas, feministas y ecologistas más allá de lo que se ha hecho antes. En la nueva hoja de ruta, se establece también el rechazo a la doble militancia para evitar adhesiones a Sumar. Además, se deja claro que "en ningún caso" se disolverán en otro partido.
"Podemos tiene que fortalecerse como organización política autónoma", afirmó Belarra este sábado frente a los aproximadamente 1.000 asistentes que llenaron el Teatro Fernando de Rojas en Madrid, según la organización. Además, añadió que solo participarán en acuerdos preelectorales cuando sean útiles y exista respeto hacia Podemos, con primarias y sin vetos. Belarra concluyó su intervención exigiendo un alto a la falta de respeto hacia Podemos.
Excluida de la cuota morada en la candidatura de Díaz, la ministra de Igualdad, Irene Montero, también intervino en el acto. Junto con otros cinco diputados en el Congreso, aspiran ahora a marcar perfil propio. En sus propias palabras: "A pesar del enorme precio político que nos quieren hacer pagar por empujar las principales transformaciones democráticas de esta legislatura y haciendo posible lo que nos decían que era imposible, no vamos a marcharnos".