Transcurría la presidencia del Dr. Raúl Alfonsín y una de sus tantas crisis económicas, fue cuando el que estas líneas escribe desde Israel por pocos días viajó a Buenos Aires, allí me encontré con un amigo con cuya familia me/nos unía una mutua relación de amistad y respeto, luego dicha persona casi llegó a lo más alto de la política argentina.
El residir en el exterior permite una visión global, inmediatamente como es obvio hablamos de los problemas argentinos, de cómo se los veían desde afuera, de la incontrolable inflación que se vivía, momento en que éste buen amigo se levanta, me entrega una carpeta y textualmente me dice "es el nuevo plan económico que Sourrouille (en aquellos momentos el Ministro de Economía de Alfonsín) implantará en pocos días".
Así como lo recibí, sin leerlo ni revisarlo, lo introduje en mi portafolio, me dije debe ser uno más de las tantos globos que se lanzan.
A los pocos días Ámbito Financiero publica en primera plana el nuevo plan de Sourrouille, el Austral, fue una, por no decir su principal primicia informativa en todo su largo historial periodístico, obligó al gobierno de Alfonsín, junto al feriado cambiario que inmediatamente se decretó adelantar su lanzamiento, ello hizo que por curiosidad buscara la carpeta que mi amigo me había entregado, era TEXTUAL a lo que Ámbito en su portada publicaba.
Comentarios dicen que a Ámbito Financiero obtener la primicia le costó varias decenas de miles de dólares, yo la tenía gratis y sin leer en mi maletín…
Meses después en un hotel donde me alojaba lo vi ingresar a Julio Ramos, propietario y director de Ámbito Financiero, al consultar me confirmaron que él también estaba allí hospedado.
Aproveché para en su casillero dejarle una tarjeta personal en la que al dorso escribí una sincera felicitación, dije que a su primicia yo la había recibido antes pero que no le había dado importancia alguna, que su olfato e inteligencia fueron por lejos superior a la mía, que él supo darse cuenta que en sus manos tenía, periodísticamente hablando, oro en polvo, que supo capitalizarlo, por ello lo felicitaba. Obviamente el carácter muy especial de Julio Ramos no le permitió responderme.
En Argentina todo es cíclico y las situaciones se repiten, la diferencia es que hoy no dejaré que la primicia se escape de mis manos.
Mi fuente es la mejor, en éste tema no existe otra mejor. Su lanzamiento estaba previsto para comienzos del mes de diciembre inmediatamente después de cerrado el período de sesiones ordinarias del Parlamento, para el Presidente Macri era su última gran jugada o posibilidad, el estar el mismo en receso era una de sus requerimientos básicos, las armas una andanada de Decretos Leyes que no dejaban cabezas sin cortar.
Los tiempos se le acortaron, el paquete de medidas aún no está cerrado ni conformado, como siempre la improvisación, la aparición del Presidente Macri en una corta presentación televisiva intentando calmar a los mercados es la mejor demostración, los mercados luego lo incineraron, credibilidad cero.
Los formadores de opinión en Argentina intentan calmar los ánimos indicando que aún no se ha llegado a los niveles de la crisis del 2001, la verdad es que en el exterior la ven como mucho peor, hay que cortar, operar de raíz.
El paquete implica medidas en donde el valor del dólar es sensiblemente superior al actual, un fuerte colchón de tranquilidad, apoyo masivo del Tesoro de los Estados Unidos quienes exigen que el esfuerzo debe estar en los Argentinos, no están dispuestos a que sus apoyos y aportes pasen una vez más a formar parte de las abultados depósitos de algunos argentinos en el exterior.
El gran debate personal del Presidente Macri, si junto al paquete de medidas anunciar su decisión de no presentarse a una nueva reelección, si se decide será un claro mensaje de que sus manos están libres para asumir los costos de cualquier medida.
Grecia como ejemplo, con ello está todo dicho.
Hasta la próxima…
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