Rescate en el Titanic Estados Unidos confirmaba esta madrugada que un avión canadiense ha detectado "sonidos submarinos" en la zona donde se busca al sumergible que organizaba excursiones para ver los restos del Titanic en aguas del Atlántico Norte.
El tiempo juega en contra: quedan pocas horas de oxígeno en la cabina.
La situación es crítica, pero el descubrimiento de estos sonidos submarinos ha renovado las esperanzas de encontrar el sumergible a tiempo. La Guardia Costera de Estados Unidos ha confirmado que el avión canadiense detectó los sonidos en intervalos de 30 minutos en el área donde desapareció el sumergible. Las labores de búsqueda, que incluyen tanto equipos marítimos como aéreos, se han ampliado a aguas más profundas en un intento desesperado por localizarlo.
La empresa Ocean Gates, que se dedica a organizar excursiones para ver los restos del Titanic, ya había experimentado un incidente similar el verano pasado. En aquella ocasión, el sumergible desapareció a unos 700 kilómetros de la costa de Nifourland, perdiendo el contacto con la superficie poco tiempo después de la inmersión. Los expertos estiman que el oxígeno a bordo no es suficiente para más de 24 horas.
En uno de los viajes anteriores de la empresa, viajó el conocido youtuber mexicano Alan Estrada, quien compartió en sus videos la emocionante experiencia de descender al fondo del océano en el submarino. Desafortunadamente, los problemas técnicos impidieron que pudiera ver los restos del Titanic en su primera oportunidad.
Sin embargo, intentó hacerlo de nuevo un año después. Ahora, las autoridades se encuentran buscando desesperadamente el submarino en el que Alan Estrada y otras cuatro personas se encontraban. El rescate se presenta como un desafío extremo, debido a las bajas temperaturas del agua y la oscuridad de la noche. Además, la capacidad de supervivencia del submarino es limitada, con una autonomía de 96 horas de oxígeno.
En este momento, quedan aproximadamente 40 horas de oxígeno a bordo. Los pasajeros no pueden salir por sus propios medios, ya que la apertura de la cabina solo puede realizarse desde el exterior por el piloto. Los restos del Titanic se encuentran a una profundidad de 3.800 metros. Una vez que se alcanza el fondo del océano, la tarea de encontrar parte del barco se vuelve enormemente desafiante debido a la profunda oscuridad.
El sumergible cuenta con luces para proporcionar visibilidad, pero desafortunadamente, estas luces están comenzando a fallar. Esta es una experiencia turística extremadamente exclusiva, con un costo de 230.000 euros por persona. Sin embargo, en este momento, el principal enfoque es el rescate de las personas a bordo y la esperanza de que puedan ser localizadas y traídas a salvo a la superficie.
Las autoridades continúan trabajando sin descanso en la búsqueda del submarino y se mantienen en estrecha comunicación con las diferentes marinas y guardias costeras de varios países. La coordinación de los recursos y el uso de tecnologías avanzadas son fundamentales para lograr un resultado positivo en esta carrera contra el tiempo.
La tensión y la incertidumbre se mantienen en el aire en espera de noticias y avances en el rescate del submarino. La historia del Titanic vuelve a capturar la atención del mundo, recordándonos la fragilidad de la vida humana frente al poder implacable del mar. Las próximas horas serán cruciales para determinar el destino de las personas atrapadas en lo más profundo del océano.