El presidente Nacional de VOX, Santiago Abascal, se ha dirigido hoy a los votantes que confíen el próximo domingo, 28 de mayo, en la formación que preside: «Su voto no va a ser malgastado, ni traicionado, ni entregado a otra fuerza política para que lo traicione». En definitiva, «quien quiera que defendamos sus convicciones, que vigilemos los gobiernos, que formemos parte de ellos y que sus ideas y principios formen parte de la acción de gobierno. Que confíe en nosotros».
En Orihuela, donde el presidente Abascal ha dado unas declaraciones a los medios de comunicación, ha insistido en que VOX no es «el coche escoba del Partido Popular». Por el contrario, «representamos a millones de españoles con unas ideas muy concretas, con unas convicciones muy firmes». Y es precisamente eso lo que VOX «va a defender en la oposición o en los gobiernos».
De este modo, también se ha dirigido al Partido Popular: «Que se olviden aquellos que pretendan trasladar a los ciudadanos que VOX tiene la obligación al día siguiente de las elecciones, de entregarles un cheque en blanco». «Eso no va a ocurrir. El que quiera que nosotros demos un cheque en blanco al Partido Popular, que vote al Partido Popular», ha sugerido el presidente Abascal.
Por otro lado, Abascal se ha mostrado preocupado por «la corrupción política sustentada en la compra de votos». «Ha sido desmantelada una red clientelar que compraba votos a cambio de sobres entregados en dinero. En las esquinas, en Melilla, un lacayo de Marruecos y un partido obediente de Marruecos, liderado por Mustafá Aberchán y socio del Partido Socialista, estaba detrás de la compra de votos», ha reprobado.
La barra libre de Sánchez
Sin embargo, ha explicado que «no hay ninguna diferencia entre la compra de votos perpetrada por Mustafá Aberchán y por los lacayos de Marruecos en Melilla, y la compra de votos sin ningún tipo de escrúpulo perpetrada por el presidente del Gobierno con el dinero arrebatado a los españoles con unos impuestos injustos».
Y es que el presidente del Gobierno ahora ofrece «barra libre, regalando entradas para el cine, viajes en tren a los jóvenes o bonos culturales con un dinero», que previamente se ha arrebatado a los trabajadores, a las familias, a las clases medias. Un dinero que «hoy sirve para que Pedro Sánchez, sin ningún tipo de escrúpulos, intente comprar el voto de los españoles».
Y es que, la corrupción política también se muestra por parte quienes «rescatan las viejas promesas incumplidas, como la del Plan Hidrológico Nacional». Es el caso del PP, que «hablan ahora de las políticas del agua, cuando han gobernado en España 16 años y no han sido capaces, ni con mayoría absoluta, de poner en marcha un Plan Hidrológico Nacional que conecte todas las cuencas en España, que facilite los trasvases y que haga que el agua llegue absolutamente a todos los rincones de nuestra patria».