Durante su intervención, el alto cargo comunitario afirmó que “nuestra democracia en Europa (sic) ha decidido que para el 2035 no vamos a poder comprar coches de combustión”. Más adelante, afirmó que eso no quiere decir que la Unión Europea deje de fabricar coches con motor de combustión, ya que, según él, se los venderemos a África.
Ante esto, los miembros de VOX en el Parlamento Europeo han presentado una propuesta de resolución ante la Eurocámara en la que piden reprobar al comisario y “suspender cualquier normativa o proyecto que imponga o pretenda imponer la prohibición de motores de combustión” en la Unión Europea.
Además, el jefe de la delegación de VOX en el Europarlamento, Jorge Buxadé, se ha dirigido a la Comisión Europea para pedirle explicaciones por estas declaraciones. A través de una pregunta con respuesta de solicitud escrita, el vicepresidente primero y portavoz europeo de VOX denuncia la condescendencia del comisario Breton y recuerda que si los motores de combustión son “perjudiciales” para los europeos, también lo son para los habitantes de otros continentes como África.
Asimismo, pide al Ejecutivo comunitario suspender las normativas que quieren imponer estas prohibiciones ya que “responden a una visión fanatizada del medio ambiente y empobrecen a las clases medias y populares de Europa”.
El pasado 10 de enero, el presidente de VOX, Santiago Abascal, respondió en Twitter a las polémicas declaraciones del comisario Breton, afirmando que son “una mezcla de totalitarismo tecnocrático con el peor colonialismo, racismo y cierta sinvergonzonería. Y hablan con tanta prepotencia porque cuentan con el respaldo de populares y socialistas”.