Abascal ha denunciado la inconstitucionalidad de la ley, que considera totalitaria, sectaria y guerracivilista, y ha enviado un recado al Ejecutivo: «Estamos preparados para resistir el ejercicio del poder totalitario; para recurrir al TC esta ley inconstitucional y para levantar todo lo que tumben; derogar cualquier ilegalidad que aprueben, y volver a construir todo lo que derriben, incluso la cruz más grande del mundo».
El diputado nacional ha recordado que esta ley atenta contra la libertad de expresión de los españoles, pero también contra la libertad de cátedra de los historiadores y contra la base de nuestra Constitución: «la Transición, el abrazo colectivo, la concordia, la mirada al futuro que nos dejaron otras generaciones».
Así, y ante una ley que «ataca la convivencia en paz y libertad de la que hemos disfrutado durante décadas de democracia», el presidente de VOX ha lamentado que este Gobierno quiera garantizar a sus socios la impunidad y la excarcelación.
«Se trata de perpetuar al peor gobierno de España en los últimos 80 años. Un Gobierno a la cabeza del paro, de la deuda pública, del encarecimiento de las necesidades básicas como luz y gasolina, a la cabeza del ejercicio del poder inconstitucional y democrático, como ha sentenciado el TC. Un gobierno que se escuda en la democracia y nos trae una ley totalitaria a la que llama de memoria democrática, mientras pacta con terroristas a los que quiere garantizar la desmemoria e impunidad de sus crímenes».
VOX no condena la historia
«No estamos aquí para condenar nuestra historia, sino para asumirla», ha continuado Abascal, que ha recordado que su partido «honra a todos los españoles que en cualquier bando lucharon y se comprometieron porque creían que lo hacían por una España mejor».
Si «el nuevo acólito de Sánchez» [Félix Bolaños], va diciendo por los pasillos cuando le advierten de la ilegalidad de sus pretensiones que no pasa nada, que tienen el BOE, VOX responde que «no ha nacido presidente ilegítimo; ni fiscal de partido, ni ley ilegítima capaz de obligar a condenar a los abuelos de otros compatriotas».
Por eso, Abascal lanza un mensaje al Ejecutivo Sánchez: «Estamos preparados para resistir el ejercicio del poder totalitario; para recurrir al TC esta ley inconstitucional y preparados para levantar todo lo que tumben; derogar cualquier ilegalidad que aprueben, y volver a construir todo lo que derriben, incluso la cruz más grande del mundo».
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