El presidente de la Ciudad, Juan Vivas, ha agradecido al europarlamentario por Ciudadanos, Jordi Cañas, el esfuerzo que ha realizado para impulsar la histórica Resolución que el Parlamento Europeo aprobó el pasado 10 de junio tras la entrada masiva de al menos 12.000 personas por el espigón de El Tarajal.
Cañas ha viajado hasta Ceuta este lunes 19, para conocer su situación actual tras los incidentes de los días 17 y 18 de mayo en la frontera.
Vivas ha calificado de: “oportuna, histórica y concluyente” dicha Resolución, porque nunca antes se había producido un pronunciamiento tan explícito de que “somos una parte esencial de España y de Europa”.
El presidente de la Ciudad, en una comparecencia conjunta con Cañas en el Salón del Trono del Palacio de la Asamblea, ha puntualizado que:
“Nunca antes, Ceuta necesitó que se transmitiera que los ceutíes teníamos al Estado y a las instituciones europeas preservando nuestra integridad territorial”.
Según el presidente Vivas, la declaración del Parlamento Europeo no solo recoge de manera precisa las amenazas y fortalezas que afectan a Ceuta, sino que supone un hito histórico.
Para Vivas, “Ceuta superó aquel trance, pero la situación está lejos de la normalidad, porque un 20 o 25 % de las personas que accedieron a nuestra ciudad siguen en ella”, según apreciaciones que baraja el presidente serian unas 2.500 personas, algo insostenible para Ceuta que:
“Tiene unas tasas de paro juvenil y pobreza disparadas, que también impacta desde el punto de vista humanitario y que afecta a la seguridad y tranquilidad de los ciudadanos, y es, por lo tanto, una situación que debe ser remediada de manera urgente e inmediata”.
El presidente considera prioritario para devolver la confianza a los ceutíes, que no solo pasa por disponer de una frontera perteneciente a la UE, dotada de las infraestructuras y medios humanos y materiales precisos, así como de la regulación que permita su funcionamiento conforme a lo que es, y añade: “y parezca lo que es”. Sino también de un plan de inversiones a cargo del Estado que:
“Mejore la calidad de los servicios públicos y fortalezca la presencia estatal en Ceuta, un plan que impulse y afiance la reconversión económica, que adapte su Régimen Económico y Fiscal Especial y que consolide la integración de la ciudad en los ámbitos de Schenguen, la Unión Aduanera y el singular hecho fronterizo”.
Y en lo que respecta a Marruecos, el presidente ha reiterado que “desea buenas relaciones de vecindad con el país vecino, basadas en la cooperación en beneficio de quienes residimos a ambos lados de la frontera”.
La envergadura del reto –para Vivas- hace que solo se pueda abordar desde el más amplio acuerdo político, social e institucional; subrayando: “desde la más absoluta lealtad institucional”.
“La crisis nos ha desvelado”, ha concluido Vivas, añadiendo que “Ceuta necesita Europa y viceversa”. El presidente ha reseñado que Ceuta tiene muchas virtudes que exportar y poner de manifiesto, alagando que:
“Es un modelo de solidaridad, modelo de una población vinculada al amor a España y hacer de la necesidad virtud y un ejemplo de gente que ha hecho del respeto una manera de ser y de vivir; de vivir compartiendo y convivir, porque Ceuta es la convivencia”.
Quien es Jordi Cañas
Cañas es el responsable de la respuesta más tajante que se le ha dado a Marruecos a raíz de violar e invadir la frontera sur de Europa en Ceuta.
El eurodiputado español, junto a sus seis compañeros de Ciudadanos, se debe la iniciativa de presentar en el Parlamento Europeo una Propuesta de Resolución.
Resolución aprobada por una mayoría, la cual rechazaba y condenaba la actitud del Gobierno marroquí por el chantaje a España, tras la “marcha verde” a Ceuta y el intento a Melilla (ciudades ocupadas para Marruecos). Resolución que también afeaba el uso de menores por parte de Marruecos poniendo en peligro sus vidas y seguridad.
Hecho fronterizo que menoscababa la soberanía territorial de la Unión Europea (un “enano político” para Marruecos), basado en una estrategia política del reino alauita para obligar a España a posicionarse en su favor en el tema del Sahara Occidental (posicionamiento que la UE ya ha definido; la ONU).
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