La sentencia de conformidad -durante la vista oral del juicio, el también presidente del Club Deportivo Tenerife admitió su culpa y aceptó su condena, al igual que sus hijas- declara probado que los acusados, entre 2008 y 2011, en su calidad de responsables de la citada compañía aérea, hicieron una interpretación fraudulenta del Real Decreto que regula el procedimiento para que los ciudadanos canarios disfruten de un descuento en los vuelos, y remitieron a sabiendas al Ministerio de Fomento ficheros de vuelos y certificaciones “que aparentaban ser correctos y contar con respaldo documental”, lo que les permitió “superar los controles rutinarios, cuando en realidad carecían de sustento o no respondían a la realidad, logrando de esta manera obtener bonificaciones superiores a las realmente debidas en los términos exigidos por el Real Decreto y la Ley de Subvenciones, por un importe de 8.399.180,32 euros”.
Además de la condena penal, el fallo impone a Miguel y a sus hijas la inhabilitación especial para el derecho a obtener subvenciones o ayudas públicas y del derecho a gozar de subvenciones o incentivos fiscales o de la Seguridad Social durante el tiempo de duración de las condenas principales, y establece que deberán indemnizar a Fomento en la cantidad de 3.987.769 euros.