Desde Aranda de Duero (Burgos), Casado hizo esta alusión indirecta a la propuesta que lanzó ayer el líder de Vox en el Parlamento. Aunque no mencionó a Santiago Abascal, sí aprovechó para recalcar la importancia de defender ya una “alternativa” a este “Gobierno radical” para que se pueda plasmar en cuanto haya elecciones generales en España.
El presidente de los populares opinó que “este país merece también una esperanza” y que “esa luz al final del túnel es que hay una alternativa política es que hay una alternativa política lista para volver a gestionar”. Y, “sobre todo”, recalcó, su partido está “listo” para lograr este objetivo “en las urnas”.
Así, remarcó que el PP quiere “ganar a la izquierda y hacerlo como sabemos hacerlo”, esto es, “atrayendo la unión de todos aquellos españoles a los que no les gusta este Gobierno radical que pacta con independentistas, con los herederos de los batasunos y con populistas”. “Nosotros tenemos que ser la fuerza tranquila, moderada, el partido de puerta ancha”, indicó.
"A FAVOR" DE SÁNCHEZ
Por ello, aseguró que en el PP caben los liberales, los democratacristianos, los conservadores y también socialdemócratas. El líder de la oposición apeló de esta manera “a la unión de todos ellos en torno al único proyecto” que puede ofrecer “una alternativa de futuro”. Avisó así de que “todo lo demás” puede ser “a favor de los que nos están malgobernando”.
Durante su intervención, Casado recordó que “venimos de unos meses muy difíciles” marcados por la pandemia del coronavirus y en los que el PP “ha tenido la mano” al Gobierno “para grandes acuerdos”. Recordó, asimismo, que estas propuestas de pactos de Estado las lleva haciendo desde el año 2018.
“Lo digo porque alguno dice que si es que crispamos…”, comentó, para a renglón seguido explicar que su partido “evidentemente” tiene “muy claro” cuáles son las políticas de Estado en las que los partidos han de ponerse de acuerdo. “Lo que no queremos es decir amén a todo cuando se hace mal”, especificó.
A su juicio, ayer se visualizó en el Pleno del Congreso de los Diputados cómo el PP hablaba de cuestiones relativas al fondo de recuperación europeo, de los brotes de coronavirus que “son muy preocupantes” o de las consecuencias “dramáticas” de esta crisis en el empleo mientras “de nada de eso habló Pedro Sánchez”.
En este sentido, Casado se quejó de que el jefe del Ejecutivo no diese ninguna respuesta a la propuesta que le hizo para que “en esa ejecución de los fondos y la preparación de los proyectos podamos ir juntos” con la creación de un alto comisionado nacional para la gestión de esos fondos europeos de recuperación. “Hay personas muy cualificadas en España”, indicó.
"PERONIZAR"
“Pedimos que estas ayudas no se puedan peronizar”, reclamó, desde la base de que estos fondos “no se pueden utilizar para intereses clientelares y tampoco para utilizar ‘planes E’ intensivos a corto plazo en mano de obra y ruinosos a medio plazo en el mantenimiento de servicios y del empleo”, trasladó.
Así, volvió a lanzar esta propuesta para crear un alto comisionado si es que “queremos ir en serio” en un momento en el que “las ayudas no pueden pasar de largo” y han de contar “con una administración eficiente” y con “buenos proyectos que sean merecedores de esas ayudsa y capaces de ejecutarlas”.
Lanzó este aviso habida cuenta de que el año pasado “España no fue capaz de ejecutar 12.000 millones de euros de fondos de cohesión” por un Ejecutivo que “no tuvo la capacidad administrativa y política”. También tuvo en cuenta que Sánchez “chupaba rueda” en la negociación europea mientras mujeres del PPE “negociaban más que el propio Gobierno español”.
Por todo ello, arguyó que “este Gobierno no da mucha credibilidad en el exterior”, más tras haber incumplido el déficit, “ocultar 3.000 millones de euros” o amenazar con la derogación de la reforma laboral pactándolo con EH Bildu. En este contexto, Casado compartió su esperanza de que Sánchez “alguna vez conteste” a sus propuestas.
Tras exponer esta situación, Casado aseguró que “nosotros seguiremos tendiendo la mano para salvar vidas y para salvar empleos, pero no para apoyar políticas o negociaciones que pensamos que son negativas para nuestro país”. A este respecto lamentó que España haya “perdido otra vez la credibilidad al entrar en estas listas negras de destinos” no recomendables a nivel turístico o para la inversión internacional.
TURISMO
En este ámbito, subrayó que el PP no puede aceptar cómo está gestionando en el ámbito turístico el Gobierno. Es más, confesó que le produce “vergüenza ajena” que miembros del Ejecutivo hablen de que “este es un país de camareros y de sectores intensivos del ladrillo y del turismo que hay que cambiar”. “¡Los planes quinquenales los dejamos ya para la época soviética!”, exclamó.
Casado también cargó contra el ministro de Consumo, Alberto Garzón, recordando aquellas declaraciones en las que se refirió al turismo como a un sector “estacional y precario”, de poco valor añadido. “Exactamente o que es él y su Gobierno”, replicó, antes de insistir en que se deben “poder financiar las PCR de los turistas para entrar y para salir” de España.
Además, en lo que atañe a la Política Agraria Común (PAC), que es “esencial” para España, Casado avisó de que sería “inaceptable” que se produzca una minoración del 10% de los fondos. “Los agricultores y ganaderos españoles no pueden ser los paganos de la reconstrucción cuando han sido sector esencial durante el confinamiento”, sentenció.
Ahondó de esta forma en que “el campo no puede pagar” y avisó al Gobierno de que ha de negociar sin admitir minoraciones de la PAC cuando “es lo que vertebra el territorio rural”. “No puede ser que la izquierda hable de los pueblos como quien va de visita”, remarcó en este encuentro organizado por el Colegio San Gabriel bajo el título ‘La España vacía y vaciada tras la pandemia. De la realidad actual al nuevo escenario global’.
Hizo especial énfasis en que “el campo no es un zoológico”, sino que “es vida, población, natalidad, riqueza y empleo”. Por tanto, “con el campo español no se juega”, avisó al Gobierno, y prometió el apoyo del PP “si vamos a negociar a cara de perro”. “¡Pero que no nos hagan comulgar con ruedas de molino!”, enfatizó el presidente de los populares.
Al participar en esta VIII edición del curso de verano ‘Prensa y Poder’, Casado también aprovechó para reivindicar el papel que juega “la prensa libre” a la hora de informar, cultivar ideas, formar y “denunciar lo que se está haciendo mal”. “Considero que es esencial que la prensa siga haciendo la labor de contrapeso al poder”, manifestó.