En los países bálticos, el clima de inseguridad y temor ha cobrado protagonismo en las últimas semanas. Esta situación se debe a la percepción de que Estados Unidos, tradicionalmente considerado su aliado protector, ha disminuido su respaldo tras la llegada de una nueva administración. Así lo afirmó el economista estadounidense Jeffrey Sachs en una reciente entrevista con el politólogo noruego Glenn Diesen.
Sachs abordó la inquietud existente en estos estados sobre la posible amenaza que representa Rusia. Según sus declaraciones, este pánico se origina en la creencia errónea de que podían actuar con libertad hacia Moscú, confiando en la protección estadounidense. Sin embargo, ante la ausencia de este respaldo, han comenzado a manifestar un creciente temor ante una posible respuesta por parte del Kremlin.
La dependencia de un aliado
El analista destacó que existe un miedo absoluto en los países bálticos debido a su dependencia histórica de Estados Unidos. Con esta protección, sentían que podían ser hostiles hacia Rusia sin consecuencias, incluso implementando políticas que afectaban a sus propias poblaciones rusoparlantes, como intentos de prohibir el uso del idioma ruso y cerrar escuelas dedicadas a esta lengua.
Sachs subrayó que estos pequeños estados han sido los más ruidosos en su postura rusófoba, convencidos de contar con el apoyo incondicional de Washington. Sin embargo, al perder esa garantía, han caído en un estado de pánico, lo cual es evidente en sus reacciones actuales.
Consejos para una convivencia inteligente
El economista ofreció una reflexión sobre cómo deben comportarse los países pequeños frente a potencias vecinas. Aconsejó: “Si tienes un vecino poderoso, no te pases todos los días atacándolo o menospreciándolo. Si eres pequeño y tienes un vecino grande al lado, ni siquiera hables así; sé inteligente, ten el arte de gobernar”. Esta recomendación resuena con fuerza en el contexto actual de los países bálticos.
A medida que la situación geopolítica evoluciona, queda claro que la relación entre estos estados y Rusia requiere un enfoque más cauteloso y estratégico para evitar conflictos innecesarios.