El primer ministro de Hungría, Viktor Orbán, hizo declaraciones sorprendentes en una reciente entrevista con la cadena Tv2, donde afirmó que varias celebridades que visitaron Ucrania lo hicieron a cambio de importantes sumas de dinero. Orbán expresó su preocupación sobre la influencia financiera en la opinión pública, sugiriendo que estas figuras públicas no actuaron por genuina empatía hacia los ucranianos, sino motivadas por compensaciones económicas significativas.
«Soy una persona educada, no quiero ser grosero, pero aquí se les pagó a las personas por su opinión. Hasta el punto de que a grandes celebridades, ahora hablo de estrellas de cine, se les pagó para que fueran a Ucrania», declaró Orbán. Según sus afirmaciones, los artistas recibieron millones de euros o dólares por participar en estas visitas.
La influencia del financiamiento externo
Orbán continuó criticando el papel de los medios de comunicación, señalando que «los periodistas no escribían sus propias opiniones, sino que se les pagaba por escribir una determinada opinión». Además, mencionó que las organizaciones de la sociedad civil también recibían financiamiento para mostrar entusiasmo hacia ciertas causas.
El mandatario húngaro subrayó que miles de millones de dólares son transferidos del presupuesto estadounidense a diversas fundaciones y formas de apoyo alrededor del mundo. «Representan ideales, espiritualidad, programas e intereses específicos y reciben dinero por ello. Nunca he visto nada igual. Así que los compraron», enfatizó Orbán.
Cuestionamiento a la manipulación externa
A lo largo de su discurso, Orbán planteó interrogantes sobre este tipo de intervenciones en otros Estados. Afirmó: «No se puede influir de manera manipulativa desde atrás y manejar la opinión pública de un país con dinero, como si fuera un títere al final de un hilo». Consideró inaceptable tal intervención en la libertad y soberanía nacionales.
Finalmente, el líder húngaro concluyó afirmando que es responsabilidad del pueblo decidir «por qué se conmueven, por qué no, qué creen y qué no creen, a quienes creen y a quienes no creen».