"No se dan cuenta que a mí me da igual porque ustedes a mí no me van a ofender nunca porque lo más duro yo ya lo he vivido. A mí ustedes no me ofenden porque se rían de unas lágrimas, ofenden a las más de 12.000 familias que no han tenido un luto porque no han podido despedirse de sus familias y son las que se vieron representadas en La Almudena. Yo no lloro por entrar en una Iglesia, porque no voy a una desde los 9 años", ha contestado a Más Madrid, durante su comparecencia en el Pleno de la Asamblea de Madrid.
Por otra parte, ha acusado este miércoles al Gobierno central de "aprovechar el miedo" para imponer su "ruta dictatorial" en la que "controlar a los medios o acosar a la oposición en el Congreso de los Diputados". Ayuso considera que "sin la colaboración público-privada no se va a poder avanzar y cuando hablen de lo privado tengan un poquito de pudor, porque lo privado también son peluqueros, comerciantes, dueños de bares o taxistas que se arriesgan y emprende a las dificultades que sus gobiernos siempre multiplican".
El 8-M, el "mayor 'infectómetro' de España"
"La última vez que nos vimos en este Pleno ustedes me estaban aquí mandando violetitas, flores moradas, para decirme que era yo muy mala mujer porque no iba a la manifestación", ha apuntado también a la oposición, reseñando lo ocurrido durante la sesión parlamentaria del 5 de marzo, mientras que la siguiente vez que se vieron, en el Pleno del 24 de abril, ya estaban "todos con las mascarillas".
"Pero qué vamos a hacer la más mínima reflexión... es mejor culpar a los recortes del PP siempre de lo mismo. Doce hospitales y 100 centros de salud que le recordaré siempre", ha defendido.
En su comparecencia inicial, Ayuso sostuvo que el 8-M y las actividades que transcurrieron ese fin de semana elevaron la proyección de contagios de coronavirus en Madrid, pero considera que la manifestación por el Día de la Mujer fue "el mayor 'infectódromo' de España", con 120.000 personas.