Nicaragua se retira del Consejo de Derechos Humanos de la ONU
La copresidenta de Nicaragua, Rosario Murillo, ha declarado oficialmente que el país centroamericano se retira del Consejo de Derechos Humanos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU). En sus declaraciones, Murillo subrayó que esta decisión es soberana e irrevocable, y abarca no solo el retiro del Consejo, sino también de todas las actividades relacionadas con este organismo y sus mecanismos asociados.
Murillo transmitió esta decisión al presidente del Consejo de Derechos Humanos, Jürg Lauber, mediante una carta firmada por el canciller nicaragüense, Valdrack Jaentschke. En su mensaje a los medios locales, enfatizó: «El informe del autodenominado Grupo de Expertos, que Nicaragua no reconoce, así como los informes anteriores y las declaraciones provenientes de la oficina del alto comisionado para los Derechos Humanos, son una evidencia del doble rasero y la politización de estos mecanismos».
Implicaciones para el desarrollo nacional
La copresidenta argumentó que estos mecanismos han sido utilizados como herramientas para intervenir en los asuntos internos del país y para menoscabar la soberanía nacional. Según Murillo, tales acciones representan un obstáculo significativo para el desarrollo económico y social del pueblo nicaragüense. Afirmó que buscan impedir avances en áreas críticas como educación, salud, vivienda e infraestructura.
Además, Murillo criticó al Consejo por violar su propia normativa, establecida en la Resolución 6251 aprobada en marzo de 2006. Esta resolución establece principios de objetividad e imparcialidad en el examen de cuestiones relacionadas con derechos humanos y prohíbe la aplicación de un doble rasero.
Finalmente, Murillo concluyó afirmando que el autodenominado Grupo de Expertos y otros organismos relacionados se han convertido en instrumentos que favorecen a quienes han atentado contra la paz y seguridad del pueblo nicaragüense, causando daños irreparables a la economía nacional.