El empresario gallego fue uno de los primeros en tender la mano al Gobierno de España en plena pandemia por coronavirus, que ya se ha llevado la vida de 30.000 personas en nuestro país.
Tanto la red logística de Inditex como sus fábricas se pusieron en marcha para luchar contra el Covid-19, pero un gesto del Ministerio de Sanidad ha quebrado la confianza en el Ejecutivo, desde cuyas filas se han escuchado en las últimas semanas quejas directas a Amancio Ortega.
A finales del mes de marzo se comenzaba a repartir el material sanitario gracias a la gigante textil española, tanto el comprado por Sánchez como por las comunidades autónomas y el propio de Inditex -guantes, gafas, gorros, máscaras, protectores faciales, batas y calzas, que sepamos-.
Se retira el material de Ortega pese a que "nos venía de fábula"
Pese a que las residencias se han convertido en el foco de infección más importante durante la emergencia sanitaria, por la vulnerabilidad de los mayores ante el virus, en una residencia de Galicia se ha retirado el material donado por Ortega, en concreto batas, por "no estar homologadas por Sanidad". Lo que más inquina le ha dado a esta empleada es que "se nos ha ordenado tirarlas a la basura", y lamenta: "no tenemos ni guantes ni mascarillas casi como para tirar nada".
Sin embargo, una trabajadora del centro apunta a que las batas "servían y mucho, lo hemos pasado muy mal", y recuerda que en la residencia, de la que no ha querido dar más datos para evitar represalias no hay bajas por coronavirus "gracias a Dios", aunque sí ha detallado que es de titularidad pública.