California ha decidido permitir que los atletas transgénero compitan en deportes femeninos, desafiando así la reciente orden ejecutiva del presidente Donald Trump, que busca proteger a las deportistas mujeres. La Federación Interescolar de California (CIF) ha manifestado su apoyo a la ley estatal AB 1266, que permite la participación en función de la identidad de género y no del sexo biológico.
Esta postura contrasta notablemente con la decisión de la NCAA, que ha prohibido a las mujeres trans participar en deportes universitarios femeninos. La divergencia entre estas políticas refleja una creciente tensión entre las directrices federales y las normativas estatales, especialmente en estados con tendencias liberales como California.
Una política controvertida
La negativa de California a acatar la orden ejecutiva se fundamenta en la ley estatal AB 1266, vigente desde 2014. Esta legislación otorga a los estudiantes el derecho a participar en deportes segregados por sexo y a utilizar instalaciones acordes con su identidad de género, independientemente de su sexo biológico. La CIF reafirmó su compromiso con esta normativa, asegurando que continuará brindando oportunidades para competir “en cumplimiento con la ley californiana”.
Sophia Lorey, directora de Outreach del Consejo Familiar de California, expresó su preocupación ante esta decisión. “Me resulta indignante que la CIF ignore la orden ejecutiva y refuerce políticas que son no solo injustas, sino también peligrosas para las jóvenes en California”, declaró Lorey.
Las inquietudes de Lorey son compartidas por padres y atletas en todo el estado. En Riverside, un grupo de dos chicas de secundaria presentó una demanda contra su distrito escolar, alegando que permitieron a una atleta trans ocupar un puesto en el equipo femenino de campo traviesa, perjudicando así a las competidoras biológicas. Las jóvenes afirmaron haber sido informadas por administradores escolares que “los transgéneros tienen más derechos que los cisgéneros” al protestar por la inclusión del atleta.
Perspectivas legales
El enfrentamiento entre la legislación californiana y la orden ejecutiva de Trump podría desembocar en un litigio. Los expertos legales están divididos respecto a si el gobierno federal puede anular políticas estatales sobre este tema. David Cruz, profesor de derecho en la Universidad del Sur de California, señaló que no existe “ninguna autoridad legal que permita a Donald Trump prohibir unilateralmente a las niñas y mujeres trans participar en deportes segregados por sexo”.
No obstante, otros opinan que el Título IX, ley federal que prohíbe la discriminación por sexo en educación, podría interpretarse como un respaldo a la orden presidencial. Gale Heriot, profesora de derecho en la Universidad de San Diego, advirtió que permitir a hombres biológicos competir en deportes femeninos podría socavar las oportunidades garantizadas a las deportistas bajo el Título IX.
El debate sobre los atletas transgénero en deportes femeninos se ha convertido en un punto álgido dentro de las guerras culturales nacionales. La orden ejecutiva firmada por Trump tiene como objetivo “mantener la promesa del Título IX” asegurando que los deportes femeninos sean exclusivos para mujeres biológicas. La decisión de la NCAA de prohibir a las mujeres trans resalta aún más el consenso creciente sobre cómo no se pueden ignorar las ventajas biológicas en nombre de la inclusividad.
A pesar de esto, California sigue siendo una excepción. Los líderes estatales, incluido el gobernador Gavin Newsom, han desestimado preocupaciones sobre equidad y seguridad, presentando el asunto como una cuestión de derechos civiles.
Fuentes utilizadas para este artículo incluyen:
FoxNews.com
Reuters.com
SFChronicle.com
FoxNews.com