Robert F. Kennedy Jr., nominado para el cargo de Secretario de Salud y Servicios Humanos, ha manifestado su intención de abolir el mandato del Departamento de Salud y Servicios Humanos (HHS) de Joe Biden que obliga a los médicos a ofrecer intervenciones relacionadas con la identidad de género. Durante su audiencia de confirmación, Kennedy expuso ante los senadores estadounidenses que una revisión exhaustiva de estudios existentes indica que estas intervenciones pueden tener impactos catastróficos en los niños.
Declaraciones durante la audiencia
En el transcurso de la audiencia, el senador republicano Josh Hawley, de Missouri, destacó cómo el HHS bajo la administración Biden había emitido una norma que requiere que todos los médicos en Estados Unidos, incluidos pediatras que reciben financiamiento federal, administren tratamientos relacionados con la identidad de género. Hawley señaló que esto afecta a casi todos los proveedores de salud en el país.
Entre las intervenciones mencionadas se incluyen tanto bloqueadores hormonales como cirugías consideradas mutilantes. Esta normativa surgió a raíz de una redefinición del término "sexo" en la legislación federal sobre salud, finalizada en mayo de 2024, que incorpora la "identidad de género", lo cual implica que no proporcionar atención denominada "afirmativa del género" sería considerado discriminatorio.
Desafíos legales y respuestas
El senador Hawley también mencionó que esta regla ya ha sido objeto de desafíos legales. Varios trabajadores del sector salud han iniciado demandas contra la administración Biden, así como fiscales generales de estados como Arkansas, Idaho, Iowa, Missouri y Dakota del Norte, junto con el Colegio Americano de Pediatras (ACPeds).
“¿Rescindirá usted esta norma que impone esta política radical?” preguntó Hawley a Kennedy. “Sí, lo haré”, respondió Kennedy, añadiendo que “esa norma es anti-ciencia”.
Kennedy hizo hincapié en que el estudio más completo sobre las intervenciones relacionadas con la identidad de género, conocido como Cass Review, concluyó que la llamada atención “afirmativa del género” tiene efectos devastadores sobre los niños.
Evidencia científica y consecuencias
Un considerable número de evidencias muestra que afirmar confusiones sobre el género puede causar daños serios, especialmente cuando se trata de niños impresionables que carecen del desarrollo mental y emocional necesario para evaluar las repercusiones a largo plazo de las decisiones impulsadas por terceros. Además, muchos estudios indican que más del 80% de los niños con disforia de género tienden a superarla por sí solos al llegar a la adolescencia tardía.
A pesar de ello, incluso las cirugías completas para “reasignación” no logran resolver la tendencia elevada hacia el auto-daño y el suicidio entre individuos con confusión sobre su género; en algunos casos, pueden incluso agravar estos problemas al reforzar su confusión y desatender las causas subyacentes de su malestar mental.
Kennedy también mencionó cómo algunos médicos han sido grabados admitiendo motivos más tradicionales detrás de estas intervenciones. Un informe revelador sobre el Centro Médico Universitario Vanderbilt indicó que un médico afirmó abiertamente que “estas cirugías generan mucho dinero”.