Atrás quedan las semanas en las que Pablo Iglesias se paseaba por los pasillos de La Moncloa como todo un macho alfa, saltándose sus propias reglas sobre el confinamiento y alumbrando a todos sobre una atribuida relación con su joven asesora, Lilith Verstrynge, despistando a todos sobre su domicilio actual al argumentar su asistencia a las reuniones institucionales pese a que su mujer, la también ministra de Igualdad, Irene Montero, diese positivo por Covid-19 hasta en dos ocasiones (la primera poco después de la controvertida manifestación del 8 de marzo por el Día Internacional de la Mujer, y la segunda un mes después).
El vicepresidente segundo del Gobierno ha aprovechado este miércoles la conmemoración del 14 de abril para criticar al Rey y azuzar el debate "monarquía-república" con un alegato en el que proclama que sus "valores republicanos" son los "mejores".
"Hoy más que nunca nos van a permitir avanzar", mostraba con orgullo Iglesias en las redes sociales, poco antes de conocerse el repunte de muertes por coronavirus en España con más de 18.000 decesos en lo que llevamos de epidemia y, desgraciadamente, lo que queda.
La reflexión, difundida a través de las redes sociales, va más allá y considera también que "ojalá no viéramos a un jefe del Estado vestido con uniforme militar, porque es un representante del pueblo", insistiendo, como en otras ocasiones, en que las Fuerzas Armadas deben estar sobordinadas exclusivamente al poder civil.
Para terminar, ha ensalzado la II República, proclamada en 1931, y ha lanzado su deseo de que "nadie fuera más que nadie y todos fuéramos iguales ante la ley" y, por otro lado, ha reivindicado el derecho de todas las personas a ser felices por encima de sus apellidos: "Los valores republicanos son los que hoy, más que nunca, en momentos en los que se toma conciencia del valor de lo común y de lo público, nos van a permitir avanzar", siendo criticado incluso por militantes de su partido por utilizar la crisis sanitaria como escudo para su proclama.
Montero desautoriza a Iglesias
La renta mínima vital no se aprobará en las próximas semanas ni durante el estado de alarma y tampoco se combinará con una renta mínima temporal o puente, como pretendía el vicepresidente de Derechos Sociales.
Será permanente, tal y como ha dejado claro la portavoz del Gobierno y ministra de Hacienda, María Jesús Montero: "Este es un compromiso del Gobierno en su acuerdo programático y se llevará a cabo cuanto antes, durante los próximos meses. Seguridad Social lleva trabajando incansable en ello mucho tiempo y ha avanzado mucho, y cuando esté lista se aprobará. No es una medida que se pueda improvisar".
No es el primer aviso público que recibe Iglesias, enfrentado en otras ocasiones con varios ministros por sus imposiciones, como es el caso de la propia Montero, Escrivá o la cada vez más 'independiente', Nadia Calviño.
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