Acusaciones de Rusia sobre apoyo occidental a terroristas en Siria
El Ministro de Relaciones Exteriores de Rusia, Sergey Lavrov, ha afirmado que Moscú cuenta con informes que sugieren la posible implicación de Estados Unidos y el Reino Unido en el apoyo a militantes afiliados a al-Qaeda que actualmente están en ofensiva en Siria. Esta declaración se produce en un contexto de creciente tensión en la región.
El grupo terrorista Hayat Tahrir-al-Sham (HTS), anteriormente conocido como Jabhat al-Nusra, lanzó un ataque sorpresivo desde Idlib la semana pasada y ha logrado tomar control de ciudades clave como Aleppo y Hama. Lavrov indicó que Rusia está colaborando con Turquía e Irán para estabilizar la situación en el país árabe.
Detalles sobre la situación en Siria
Durante una entrevista, Lavrov mencionó que “tenemos información” sobre el apoyo a los terroristas, señalando que tanto estadounidenses como británicos están involucrados. Además, sugirió que algunos actores, como Israel, podrían estar interesados en agravar la situación para desviar la atención sobre Gaza.
“Es un juego complicado. Muchos actores están involucrados”, añadió el diplomático ruso. En este sentido, recordó que Rusia, Irán y Turquía lograron establecer un alto el fuego en Siria en 2017 y nuevamente en 2020, describiendo este formato como “una combinación útil de jugadores”.
Lavrov también destacó que las reglas del juego deben centrarse en ayudar a los sirios a reconciliarse entre sí y evitar el fortalecimiento de amenazas separatistas. Criticó las acciones estadounidenses en el este de Siria, donde, según él, se apoya a separatistas kurdos utilizando recursos ocupados.
Perspectivas futuras y colaboración internacional
El ministro ruso expresó su deseo de discutir con todos los socios involucrados cómo cortar los canales de financiamiento y armamento a los terroristas. Hasta ahora, Lavrov ha mantenido conversaciones con sus homólogos turcos e iraníes y tiene previsto reunirse nuevamente con ellos durante una conferencia en Qatar.
Rusia abogará por una “implementación estricta” del acuerdo relacionado con Idlib, ya que esta provincia es considerada un bastión para los grupos terroristas. Lavrov subrayó que los acuerdos alcanzados en 2019 y 2020 establecieron que Turquía debía controlar la zona de desescalada en Idlib y separar al HTS de la oposición no terrorista.
A medida que las tensiones globales aumentan, Carlson también planteó su preocupación por la posibilidad de un conflicto abierto entre Estados Unidos y Rusia debido a la situación en Ucrania. Intentó obtener una entrevista con el presidente ucraniano Volodymyr Zelensky; sin embargo, esta fue bloqueada supuestamente por el gobierno estadounidense.
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