Mazón criticó al Gobierno, culpándole del retraso al enviar alertas a los móviles de los ciudadanos afectados, alegando que la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ) no proporcionó suficiente información y desactivó la alerta hidrológica en tres ocasiones.
Ha sido en declaraciones a Antena 3, donde Mazón acusó a la CHJ, dependiente del Ministerio, de desactivar la alerta hidrológica varias veces. Aseguró que la Generalitat no fue informada por la CHJ hasta las 18.45 del martes, momento en que se alertó sobre la caída de 1.700 litros por metro cuadrado en algunas zonas de Valencia y, poco después, sobre el riesgo de rotura de la presa de Forata, que resistió.
¿Desviando el foco ante la evidencia?
El Ministerio de Transición Ecológica aclaró que las competencias de las confederaciones hidrográficas incluyen la medición y actualización de datos sobre pluviosidad y niveles de cauces, pero no la emisión de alertas públicas. Esta responsabilidad recae en las autoridades de protección civil, quienes deben evaluar los riesgos y emitir las alertas necesarias.
Transición Ecológica mencionó que las confederaciones disponen de un sistema automático de información hidrológica (SAIH) para monitorizar caudales, permitiendo a las autoridades de emergencia valorar riesgos y tomar medidas preventivas, utilizando también datos meteorológicos de la Aemet.
Respecto a la DANA, el Ministerio indicó que la primera crecida del Barranco del Poyo, a las 12:30, motivó la alerta por parte del Centre de Coordinació d’Emergències de la Generalitat Valenciana, advirtiendo del peligro de acercarse a cauces y barrancos. Este aviso fue precedido por un aviso rojo de la Aemet a las 7.31 del martes.
Los caudales en el Barranco del Poyo disminuyeron progresivamente, pero a partir de las 17.00, se registró un aumento brusco que a las 18.55 alcanzó 2.282 metros cúbicos por segundo, momento en el cual los sistemas de medición fueron arrastrados por la corriente.
Responsabilidad de la Generalitat
El Ministerio subrayó que las autoridades valencianas contaron con predicciones y datos sobre el aumento del caudal del Barranco del Poyo, especialmente críticos desde las 17.00 horas, pero no emitieron la alerta hasta lo que los ciudadanos consideran que ya "era demasiado tarde".
Si (
No(
Traductor
