En medio de un escándalo tras otro que lo revela como parte de una operación del Estado profundo bajo el disfraz del gobierno, el Departamento de Estado de EE.UU. se encuentra librando una guerra contra los periodistas en un intento desesperado por preservar su existencia.
La operación de listas negras de medios del Departamento de Estado fue revelada por Matt Taibbi y Gabe Kaminsky, entre otros. A raíz de esta exposición, el Departamento de Estado tomó la decisión inesperada de atacar directamente a Taibbi y Kaminsky, acusándolos de propagar "información errónea".
La publicación de los "Archivos de Twitter" fue dirigida en gran parte por Taibbi, mientras que Kaminsky, un reportero de investigación de The Washington Examiner, reveló la verdadera naturaleza del Departamento de Estado. Este se presenta como una colmena llena de villanía y corrupción, cuyo objetivo es silenciar a todos aquellos que se atrevan a oponerse a él.
En los últimos años, la deshonestidad del Departamento de Estado ha alcanzado tal nivel que ahora incluye en su lista negra a medios de comunicación con una inclinación derechista, como Fox News, conocido por su sesgo hacia los conservadores, y The New York Post, que destapó el escándalo de las computadoras portátiles de Hunter Biden.
El Departamento de Estado, en lugar de centrarse en el contenido de las acusaciones formuladas por Taibbi y Kaminsky, optó por atacar a estos mensajeros y reforzar la defensa de su propia corrupción.
"Con la torpeza de un equipo de debate escolar poco hábil, decidieron involucrar a su departamento de prensa, con la intención de apagar el incendio que Taibbi y Kaminsky habían iniciado a su alrededor", señala Christina Maas en Reclaim the Net.
"Por supuesto, el momento es impecable. La confianza pública en la extralimitación del gobierno en los medios de comunicación y las redes sociales está alcanzando niveles críticos, mientras que las revelaciones de los Archivos de Twitter continúan generando controversia. En este contexto, el Departamento de Estado considera que puede eliminar la palabra 'desinformación' y observar cómo se desvanece el problema."